En camino hacia la costa caribeña Panameña, con destino final en las paradisíacas islas de San Blas, una sola ruta por tierra conecta con el puerto de salida en Cartí. No hay forma de evitarla, salvo que viajes en avioneta, aunque difícilmente ninguna de estas pequeñas aeronaves que llegan hasta los dominios de los Guna se muevan tanto en el aire como lo pudieras hacer viajando por tierra en esta endemoniada carretera.
Un auténtica montaña rusa de 40 kms, con subidas y bajadas constantes, divide juicios entre los que la aman y la odian. No hay intermedios. Llegas con la sonrisa más amplia o con el desayuno sobre tu falda…
Para mí, que soy de aquellos que disfrutan encadenando curvas como pocas cosas en la vida, puedo decir que descubrí allí la mejor carretera que alguna vez halla transitado.
Allí les van algunas fotos. Los reto a enseñarme una mejor.