Boda sin sonrisas
Un curioso ritual en las calles de Quito
El centro histórico de Quito, con sus múltiples templos e iglesias profusamente ornamentadas, se me antoja como uno de los lugares ideales para programar una boda, sobretodo si las motivaciones religiosas tienen algún significado en la vida de los novios.
La demanda para por ejemplo reservar un espacio en un lugar icónico como la Iglesia jesuita de La Compañía es alta, casi tanto como su costo, que puede rondar los quinientos dólares.
De allí, que la celebración de un matrimonio en un lugar como estos no esté al alcance de todos los bolsillos y por ende esté reservada a familias acomodadas, o que busquen acomodarse…
Los matrimonios arreglados o concertados fueron una práctica común en varias regiones del mundo hasta muy entrado el siglo XX. Desconozco si en pleno siglo XXI siguen siendo tan habituales en Latinoamérica como lo fueron durante su época colonial, pero muchas de las expresiones que me encontré, en esta cobertura que por sorpresa me sorprendió caminando por la calles de la capital Ecuatoriana, me dieron mucho que pensar.
La fotografía de eventos sociales no son para nada una temática que interese a mi cámara, a menos que el trabajo resulte en un fin documental. Definitivamente quizás no tengo el timing ni manejo las técnicas más apropiadas para registrar en imágenes una boda, pero tan malo no debo ser para que en más de 100 disparos que hice en la procesión de esta pareja y su comitiva, casi no registrara sonrisas.
Ustedes me dirán, toda edición puede reforzar una idea o un concepto buscado para una historia. Pues bien, les aseguro que yo buscaba alegría en esas imágenes, es lo más natural. Pero por la razones que fueran, las sonrisas brillaron por su ausencia.
Los invito a juzgar por si mismos.
PRODUCCIÓN:
Sergi Walker
FECHA:
JUL 2019
LUGAR:
#Guatemala #magia #mujeres #fotografía